(Artículo publicado en el diario La Verdad el día 30/10/2003)
Bioconstrucción es un término que se utiliza desde hace poco para definir el hecho de que el objeto de toda arquitectura es el hombre considerado holísticamente, entendiendo este término como que el todo es más que la suma de las partes.
Aquí solo vamos a esbozar algunos puntos a los que se da especial importancia, para ello se estudian detenidamente diversos parámetros que aquí solo mencionaremos:
1.- Situación del edificio.
2.- Orientación y radiación solar: Bioclimática, energías pasivas y energías renovables.
3.- Sistema estructural y constructivo.
4.- Materiales
5.- Aprovechamiento del agua y su depuración.
6.- Instalación eléctrica.
1.- Situación del edificio.-
• A nadie le sugiere confort la instalación de una vivienda en un lugar con contaminación atmosférica o sonora, es decir cerca de carreteras con mucho tráfico, industrias , vías férreas, aeropuertos, … todo lo contrario que si estamos junto a jardines, parques o zonas arboladas.
• Estudiaremos si tiene contaminación electromagnética, con líneas de alta tensión, transformadores o tendidos eléctricos no aislados debidamente, adosados a los edificios.
• También analizaremos la composición del terreno, por si es altamente magnético, o si tiene alguna geopatía como fallas, escapes de gas radón, o vetas de agua o radiaciones telúricas. En determinados casos es muy interesante que un técnico haga un estudio geobiológico.
• De todos es conocido el problemático tema de las ondas de las antenas de telefonía móvil, debido a su sistema digital, si podemos evitarlas hagámoslo.
2.- Orientación y radiación solar. = Bioclimática. Energías pasivas y energías renovables.-
Este punto se tratará más extensamente a continuación.
3.- Sistema estructural.-
Se recomienda, en pequeñas obras, el uso de sistemas tradicionales de muros de carga y forjados apoyados de viguetas de madera, pero eso es una decisión que tiene que tomar el Arquitecto en cada caso, dado que Alicante es zona sísmica, no siempre es recomendable este sistema.
Se han rescatado los arcos y las bóvedas como elementos estructurales, no meramente ornamentales, también las escaleras a la catalana. Desgraciadamente la carencia de mano de obra especializada, dificulta y encarece grandemente el poder aplicarlo.
El hormigón es muy cuestionado en bioconstrucción por la toxicidad de algunos de los aditivos que se añaden al cemento gris, recomendándose siempre el cemento blanco y arenas y gravas calcáreas, evitando las cristalinas (cuárcicas y silíceas) por el alto nivel de radioactividad.
No se recomiendan las estructuras íntegramente metálicas por provocar alteraciones en los campos magnéticos y eléctricos; en cualquier caso deben estar bien conectadas a tierra para no provocar el efecto Jaula de Faraday
4.- Materiales.-
Los materiales tienen que carecer de toxicidad o de radiactividad, y en su producción no se habrá incurrido en un expolio ecológico, se preferirán los de la propia zona, e incluso los reciclados.
La madera será de bosques autosostenibles y estará exenta de tratamiento con productos tóxicos como pentacloro, fenol, lindane o formaldehídos en algunos aglomerados.
Si está correctamente secada, no es atacada por hongos ni parásitos, y puede protegerse con sal de boro.
Los barnices deben controlarse, escogiendo los naturales a base de aceite de linaza y con disolventes no tóxicos.
La arcilla es uno de los mejores materiales de construcción, tanto en tapial como adobe o en los ladrillos cocidos ( a no demasiada temperatura para evitar la cristalización) como los bloques de varias cámaras.
Se recomienda el uso de yeso natural y cal, esta última usada sola en estucos y para morteros o en combinación con cemento en el mortero bastardo. El estuco es un acabado de fachada de gran calidad y durabilidad, que mantiene sus colores muchos años y con, desgraciadamente, pocos conocedores de su técnica.
La piedra es un gran material, y mejor si es calcárea porque absorbe radiaciones terrestres de baja intensidad.
Las paredes deben respirar, eso implica pinturas no plásticas que sean higroscópicas (paso de vapor, pero no de agua) por lo que se recomiendan pinturas minerales al silicato ( en interior también pueden usarse pinturas a la cal).
5.- Aprovechamiento del agua y su depuración.-
Las tuberías de agua potable, fría y caliente, se recomienda acero inoxidable, polietileno reticulado o polipropileno.
En viviendas unifamiliares, se recomienda crear dos redes de saneamiento, una llamada de aguas grises que recoge el agua de limpieza, la cual se puede utilizar para regar tras hacerla pasar por una ligera depuración a base de filtros para quitar los jabones, y la de aguas residuales se harán pasar por una depuradora y posteriormente a un lagunaje (una laguna con un estudiado diseño) que la volverá a filtrar con plantas y aportación de oxígeno; pudiendo ser utilizada para regar, incluso una cubierta verde del edificio.
6.- Instalación eléctrica.-
Además de las condiciones exigidas por el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión, se recomiendan circuitos independientes a cada dormitorio, instalando un relé automático de desconexión de tensión en ausencia de consumo, que cambia la tensión alterna de 230 V a otra continua de 1,5 V que le sirve para detectar si hay demanda de consumo; no sirve de nada si conectamos aparatos que tienen consumo siempre como videos o relojes.
Alejar de nuestra mesilla lamparitas con transformador incorporado.
Colocar todos los interruptores de corte bipolar.
Los cables deberían pasar por tubos metálicos conectados a tierra (importantísimo revisarla periódicamente.)
Tanto el aislamiento como la protección de los cables deberían estar exentos de policloruro de vinilo y sustancias organocloradas que al calentarse por encima de los 60º C desprende vapores de cloro.
Los cables no serán propagadores del incendio, y tendrán emisión de humos y opacidad reducida.
Arquitectura bioclimática
Con la correcta orientación de un edificio podemos conseguir:
a) Aprovechamiento de la radiación solar, con el aumento del confort y la luminosidad.
b) Protección de los vientos dominantes y aprovechamiento de las brisas beneficiosas.
Esto nos permite reducir gastos de calefacción y refrigeración, consiguiendo que las diferencias de temperatura en el interior del edificio sean mínimas a lo largo del año y aprovechando las innovaciones de la Arquitectura Bioclimática podemos lograr el máximo aprovechamiento energético, tendiendo a una climatización autónoma.
El clima, tradicionalmente, ha condicionado los edificios, tanto en su material (construcciones de madera en norte y centro de Europa), como en la forma, en climas extremos, calor de día, frío de noche, las casas son compactas con materiales de gran inercia térmica.
La creciente reducción de los recursos petrolíferos, obligó a crear una normativa sobre el aislamiento de los edificios, que es, en algunos casos, perjudicial, no sólo porque algunos aislantes tienen un acción perjudicial para el hombre, sino porque en ocasiones se consigue que el consumo energético sea aún mayor, ya que impedimos que el calor solar entre en la vivienda. (figura 1). Se calienta la estructura y el muro, pero ese aporte energético no llega al interior.
La forma más sencilla de Arquitectura solar es el efecto invernadero, que permite que la radiación solar penetre, de día, directamente en el edificio calentando la masa interior, que de esta manera se trasforma en un acumulador, posteriormente, de noche, se cierra el hueco al exterior, y dicho material emite calor (figuras 2, 3).
En estos dibujos vemos cómo el aislante se coloca en las paredes frías norte, este y oeste, acristalando al máximo en el sur; el alero es de gran vuelo para impedir que el sol entre en verano, en el que la radiación es más perpendicular, no ocurre así en invierno que la altura del sol (ángulo de inclinación del sol) es menor (figura 4).
Todo este sistema se puede hacer más complejo, como en el esquema siguiente (figura 5) en el que incorporamos al sistema pasivo del invernadero, sistemas activos de ventiladores; el aire al calentarse sube y es canalizado e impulsado por ventiladores por toda la casa, enfriándose el aire que retorna al invernadero. Además el sol calienta los acumuladores y el muro de gran inercia térmica que por la noche sueltan el calor.
En verano el invernadero se abre totalmente o se cubre con un toldo exterior, al mismo tiempo parte de la conducción existente nos sirve al comunicarla con unas salidas a la zona norte de la casa en sombra y que por lo tanto nos aportan aire fresco.
Las energías renovables son otra forma de aprovechar la energía solar y la eólica, podemos aprovechar la energía solar para calentar el agua y conseguir agua caliente sanitaria. La energía térmica es actualmente obligatoria en algunas regiones.
Si usamos la energía solar para calentar un líquido que discurre en un circuito cerrado estamos creando un equipo de energía térmica para calefacción como vemos en el siguiente esquema (figura 6).
La red de distribución puede ser por el suelo o por las paredes, los colectores tienen que ser calculados en tamaño y número, en función de las necesidades y deben colocarse en la posición óptima de aprovechamiento, dependiendo de la latitud y del medio ambiente.
Utilizamos placas fotovoltaicas para convertir la energía solar en eléctrica que podemos utilizar inmediatamente o acumularla en baterías o en la red eléctrica general si disponemos de ella, esta energía eléctrica tiene muchas ventajas, tanto si somos autónomos como si usamos la red eléctrica como batería, pues estamos aportando electricidad en una zona sin apenas pérdida de carga.
La energía eólica es muy eficaz en zonas con menor aporte solar, ya sea sola o combinada con esta, en ella se transforma la acción del viento mediante molinos en energía mecánica, al igual que ocurre en los saltos de agua, el único inconveniente es la gran alteración paisajística que se produce, Navarra es Comunidad que más ha desarrollado esta energía.
Otras energías renovables son la biomasa y la maremotriz.